Cada vez más, incrementan los incidentes en los que los inquilinos dejan de cumplir con el pago del alquiler de las viviendas y continúan ocupándolas. Indudablemente, esto ocasiona un perjuicio significativo para los arrendadores, quienes ven cómo sus propiedades no generan ingresos y, al mismo tiempo, se ven privados de la posibilidad de disfrutar de su propiedad al encontrarse ocupada. Veamos que se puede hacer en estos casos para conseguir solventar la situación de la mejor forma posible.
Pasos para resolver el problema
En primer lugar, es necesario entablar una conversación con el inquilino y comunicarle que efectúe el pago de las cantidades pendientes. De lo contrario, se enviará un burofax instándole a cumplir con la obligación, con detalles precisos sobre la cantidad y el plazo para el pago. También se le informará que, en caso de incumplimiento, se tomarán medidas judiciales. Siempre será preferible alcanzar un acuerdo con el inquilino para que realice el pago correspondiente.
Si estas medidas no resultan efectivas, se procederá a iniciar el proceso de desahucio por la vía judicial. Para ello, es necesario que el inquilino haya dejado de abonar al menos tres mensualidades. Es importante destacar que el inquilino tiene la opción de detener el desahucio si liquida la deuda pendiente.
Protégete con un seguro de impago de alquiler
Si tu principal preocupación al alquilar un piso es si el inquilino seleccionado será buen pagador, tu mejor solución es contratar un seguro de impago de alquiler.
Gracias a esta herramienta, no será necesario inquietarse en caso de que el inquilino deje de cumplir con el pago de las rentas. El seguro contratado se encargará de gestionar la reclamación del dinero impagado, proporcionar protección legal y compensar los daños causados por el inquilino en la vivienda.
Consejos prácticos para prevenir la presencia de inquilinos con pagos atrasados
Verificación de antecedentes
Realiza una verificación de antecedentes, que incluya historial crediticio, referencias laborales y personales, para así conocer a los candidatos antes de firmar el contrato.
Comprobación de ingresos
Solicita pruebas de ingresos estables, como recibos de nómina, declaraciones de impuestos o contratos de trabajo estables, para asegurarte de que el inquilino tiene la capacidad financiera para cubrir el alquiler.
Referencias de alquiler anteriores
En caso de que sea posible, contacta a los propietarios anteriores para obtener referencias sobre el comportamiento de pago y la conducta del inquilino.
Contrato de arrendamiento sólido
Asegúrate de que el contrato de arrendamiento sea claro y completo, especifica los términos de pago, las fechas límite y las consecuencias por pagos tardíos.
Fianza
Cobrarle una fianza inicial como mínimo equivalente a una mensualidad, en caso de que los pagos se incumplan esta fianza no se devolverá al inquilino y servirá como compensación.
Política clara sobre pagos atrasados
Establece una política clara sobre pagos atrasados, incluyendo las tarifas por retraso y las acciones que tomarás en caso de morosidad.
Con Nester, podrás tener contratado un seguro de impago para asegurar cualquier demora o falta de pago que tengan tus inquilinos. Además, con el sistema de pagos automáticos, cada mes se hará el desembolso automático y podrás cobrar la renta con solo un clic. Descubre todas las ventajas que tiene Nester y empieza a gestionar tus inmuebles de forma inteligente.