¿Qué hago, vender o alquilar? Esta es la pregunta que los clientes y usuarios de Nester nos trasladan día tras día. Y son tantos los matices y las diferentes opiniones que puedes encontrar navegando por blogs, hablando con familiares, amigos, compañeros de trabajo, etc. que nos hemos decidido en hacer esta entrada para que aquellos que queráis sacar algo de rentabilidad a vuestros inmuebles tengáis toda la información posible para que podáis decidir entre alquilarla o venderla.
Y antes de empezar queremos ser totalmente sinceros y claros: en este post no encontraréis una respuesta. Lejos de otros blogs y portales en que os dirán cual es la mejor opción nosotros optamos por daros una serie de tips a tener en cuenta a la hora de escoger entre una modalidad u otra. ¡Empezamos!
El aspecto económico
Empecemos por una de las cuestiones clave en todo esto: ¿qué opción es más beneficiosa económicamente, vender o alquilar?
A simple vista uno puede pensar que el hecho de vender puede proporcionarte mayores ganancias patrimoniales, pues ciertamente no es lo mismo recibir un pago de 300.000€ que uno de 700€. Ahora bien, nuestro primer tip es que no te dejes llevar por esas cifras o por los ceros de la operación ya que si bien podrás obtener una ganancia inmediata seguramente detrás de ello se esconderán gastos que debes tomar en consideración como pueden ser impuestos sobre esa ganancia patrimonial o gastos asociados a la venta (agencias, publicidad, reformas, abogados etc.), por ejemplo.
Por otro lado, si lo que quieres es tener una seguridad financiera a largo plazo y una ganancia patrimonial sostenida a lo largo de los años debes valorar el poner en alquiler tu vivienda. Debes tener en cuenta que pese a que los ciclos económicos y altibajos del mercado de la vivienda pueden hacer devaluar el precio de tu vivienda la tendencia normalmente es alcista para aquellas viviendas bien conservadas y en zonas de alta densidad poblacional, por lo que el hecho de alquilar una vivienda no supone una pérdida de patrimonio como la venta pese a que el beneficio es a más largo plazo.
El día a día…
Otro de los aspectos que debes tener en cuenta – y es muy importante que hagas una buena valoración de ello- es la diferencia que existe entre vender o alquilar en lo que a gestión y trámites se refiere. Y es que como ya sabrás, el hecho de alquilar conlleva una serie de trámites y gestiones al propietario que pueden implicar una serie de dolores de cabeza si no se gestionan de manera eficiente.
En caso de no tener una herramienta para la autogestión de inmuebles en alquiler como la que ofrecemos desde Nester, debes tener en cuenta que deberás publicitar tu inmueble, buscar los inquilinos, escoger aquellos que tengan capacidad económica para hacer frente a las mensualidades, hacer reparaciones del inmueble, gestionar incidencias, etc. Todo ello te supondrá invertir tiempo y recursos para cumplir con todas tus obligaciones. De este modo, la venta de tu inmueble puede suponerte una mejor opción si lo que buscas es una despreocupación total de ese inmueble pues únicamente deberás hacerte cargo de buscar un comprador que pague el precio que pidas haciéndote cargo únicamente de aquellos gastos asociados a la propia compraventa.
Para resumir…
Sabemos que nos dejamos muchos aspectos a valorar, pero hemos querido contraponer dos de las materias que debes tener muy en cuenta a la hora de escoger la opción que mejor se adecúa a tus necesidades. Así pues, y para finalizar debes hacerte las siguientes preguntas y hacer un buen cálculo “coste-beneficio” de cada una de las respuestas:
- ¿Qué motivo me lleva a vender? ¿Necesito liquidez inmediata? ¿Quiero invertir en otros activos?
- ¿Qué motivo me lleva a alquilar? ¿Quiero asumir el coste que conlleva mantener el valor del activo durante un periodo largo de tiempo?
- Si vendo, ¿tengo claro que voy a hacer con el dinero?
- Si alquilo, ¿estoy dispuesto a asumir los costes de reparaciones e incidencias con el inquilino?
- ¿Quiero dejar algo a mis hijos?
- ¿Cuál es la tendencia del mercado de la vivienda?
- ¿Estoy vendiendo a un precio satisfactorio?
- ¿Existe suficiente demanda de inquilinos en mi zona?